Selva Riquelme: La inclusión es un gesto revolucionario

Generar oportunidades y espacios para las personas con discapacidad puede ayudar a que alcancemos un sueño: lograr una sociedad inclusiva y accesible. De eso conversamos con Selva Riquelme, comunicadora y facilitadora de programas sobre discapacidad, inclusión y derechos humanos.

Hace unos meses tuve la oportunidad de conocer a Selva Riquelme, comunicadora y facilitadora de programas sobre discapacidad, inclusión y derechos humanos para hablar de cómo normalizar la inclusión usando la empatía y la tolerancia como principales valores y cómo podemos enseñar al Estado que “deje de ser desastre, para ser oikoite” y se construya una verdadera sociedad accesible.

En Paraguay, cerca del 11% de la población cuenta con alguna discapacidad. Es un porcentaje altísimo, sin embargo, en la realidad cuando hablamos de espacios inclusivos ellos aún siguen siendo minoría. A pesar de que se haya logrado, en papeles, leyes acerca del tema, Selva dice que la inclusión no debería ser una obligación, sino una actitud que cada una de las personas debe tomar.

Es allí cuando aparece la primera barrera, la actitudinal. A pesar de que en su familia jamás le hicieron creer que ella no podía lograr lo que quería, hay familias que “aislan y en el nombre del amor le sobreprotegen a su hijo adolescente” cuando ellos pueden ser como cualquier otra persona que sale a bailar o a divertirse con sus amigos.

“Cuando todos miran nuestra discapacidad y nadie mira nuestra capacidad. Cuando nos contratan en un trabajo solo para cumplir una ley o llenar las estadísticas, allí está la barrera actitudinal”

Otra de las barreras con las que se siguen encontrando las personas con discapacidad todos los días es la comunicacional, que es difícil y triste porque se percibe con facilidad.

“Cuando hablamos con personas con discapacidad tenemos que mirarles a la cara y dirigirnos a ellas directamente, sin vergüenzas y sin miedo, esto significa construir ciudadanía inclusiva”

También, está la barrera arquitectónica porque, en nuestro país por sobre todo, no se crean espacios óptimos para que ellos puedan tener autonomía e independencia, así como tampoco dan accesibilidad para gestionar documentos o ser libremente parte de una entidad.

“Si solo somos incluidos y no somos integrados, nunca vamos a tener autonomía”. Selva también hace un poco de historia, recuerda que los jóvenes siempre marcaron la diferencia, siendo los protagonistas principales del cambio. Fueron los que pelearon para la independencia de nuestro país, pelearon en la guerra de la Triple Alianza y del Chaco, que fueron ellos los que estuvieron en el Marzo Paraguayo y son ellos los que están generando espacios, como la FENAES, para que la educación mejore.

Y, por último, la sociedad y sobre todo los jóvenes que la están construyendo, tenemos que usar esa misma fuerza que nuestra historia nos enseña para comenzar a usar la inclusión como un arma más de revolución en Paraguay.

Selva Riquelme, comunicadora y facilitadora de programas sobre discapacidad, inclusión y derechos humanos. / GENTILEZA

***