Un artículo periodístico titulado «Canciones de cuna en los calabozos de Stroessner», publicado por Jorge González en el periódico E’A, sobre niños nacidos en prisión en Paraguay durante la dictadura del general Alfredo Stroessner, le permitió a la cineasta peruana Sofía Paoli Thorne conocer la historia de Celsa Ramírez Rodas, una reconocida defensora de los derechos humanos, víctima del régimen tiránico y poder contar su historia en una película documental que viene cosechando importantes premios a nivel internacional.
Guapo’y, realizada en 2022, ha sido exhibida hasta ahora en varios países y finalmente, desde el 26 de octubre, se estrena en salas de Asunción, planteándose además un recorrido por diversos espacios.
“Después de un largo recorrido y reconocimientos logrados en festivales internacionales, finalmente vamos a estrenar en Paraguay. Nuestra búsqueda fue siempre que la película llegue a un público amplio, que sea un lugar de encuentro y de diálogo. Por eso apostamos a salas comerciales y posteriormente salas alternativas y, a mediano plazo, a realizar una distribución más amplia que nos permita llegar a todo el país”, destaca la directora.
Celsa Ramírez Rodas fue detenida en 1975, por ser militante del Partido Comunista Paraguayo (PCP), al igual que su marido, Derlis Villagra, quien integra la lista de los desaparecidos. Ella estaba embarazada de cuatro meses de su primero hijo, fue torturada y llevada a Emboscada, donde tuvo a su bebé. Ella evoca la sombra protectora de un frondoso árbol de Guapo’y, que la cobijó junto a su madre, su pequeño hijo y sus compañeros detenidos, dado título a la película.
“Sin embargo, el olvido amenaza la sanación; la de Celsa y la de un pueblo sometido a una desmemoria impuesta. El pasado resuena; el país es gobernado aún por el mismo partido de la dictadura”, apuntan los realizadores del filme.
Historias que se encuentran
“Guapo’y es para mí la confirmación de que las historias nos encuentran. Celsa, con su amabilidad y simplicidad, me enseña la importancia de luchar acompañadas. También que la sanación no se puede llevar adelante sin el encuentro con una misma; con sus imágenes y recuerdos. Con los puntos de dolor”, dice la directora, Sofía Paoli Thorne.
Para la cineasta, el tránsito de Celsa es “la necesidad del pueblo paraguayo; la necesidad de no olvidar y de no permitir que la desmemoria sea promulgada por los actuales dirigentes que reivindican los peores años de la historia de un país, años de terror y silencio. Guapo’y es un relato urgente de un cuerpo doliente que necesita sanar”.
El documental es una coproducción de Tekoha Audiovisual (Paraguay), Mita’i Films (Argentina), Algo que se mueve (Argentina) y Doha Film Institute (Qatar). El filme viene acumulando reconocimientos desde su estreno mundial en la 35° edición del Festival Internacional de Cine Documental de Ámsterdam (IDFA), donde obtuvo una Mención Especial del Jurado así como también en el 26° Festival de Cine de Málaga en España, donde se alzó con una biznaga de plata para la Mejor Dirección en la sección Oficial de Documentales.
El filme ha logrado también el premio a la Mejor película (ex aequo) en la Competencia de cine de Derechos Humanos, dentro del 41º Festival Cinematográfico Internacional del Uruguay.
Además, la película recibió en Brasil el Premio del Jurado y el Premio de la Crítica en el 17BH Festival Internacional de Cine de Belo Horizonte, Brasil. Además, actualmente se encuentra como candidata de la Academia de Cine de Paraguay a los prestigiosos premios GOYA de España, en la categoría Mejor Película Iberoamericana.
